En el mensaje “Mantengámonos Alejados del Terrado”, vimos como inicios aparentemente inocentes pueden tener resultados desastrosos cuando entretenemos aún la mas pequeña área de tentación. Esto se vuelve aún mas crítico cuando nos casamos; entonces, el resultado de la tentación puede causar gran dolor a aquel dado a nosotros como un regalo de Dios.
A la mitad del sexto día, Dios había creado el sol, la luna y las estrellas; la tierra, el cielo, y el agua; los peces, las aves, las plantas y los animales – y cuando vio a Su creación, “Y Dios consideró que esto era bueno” (Génesis 1:25). Pero todavía no estaba completa Su creación: “y dijo: Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza” (Génesis 1:26), y del polvo de la tierra, Dios sopló vida al hombre y le puso en el Jardín de Edén, “para que lo cultivara y lo cuidara” (Génesis 2:15).
Mientras que Dios vio al hombre ocuparse en su trabajo, vio que algo no estaba correcto. Algunos han sugerido que el hombre parecía un poco triste – otros han bromeado que el hombre estaba haciendo un gran desorden y caminaba, perdido y confundido. Cualquiera que sea la causa, Dios vio a Su última creación y dijo:
Génesis 2:18
“No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada.”
Adán necesitaba mas que alguien para ayudarle con sus tareas, el necesitaba a alguien que lo hiciera completo! Entonces Dios formó a la mujer, no de la tierra, pero de una costilla tomada del lado de Adán; “Ésta sí es hueso de mis huesos y carne de mi carne” (Génesis 2:23).
Si Dios nos da a alguien como un regalo especial para hacernos completos, ellos deben ser queridos y protegidos de por vida; “Por tanto dejará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán una sola carne” (Génesis 2:24). Como piezas de un rompecabezas que encajan perfectamente, un matrimonio ordenado por Dios se une y se cumple haciendo que los dos formen uno.
Es triste que rápidamente nos olvidamos de estas verdades básicas. Continuamos poniendo nuestros deseos personales adelante de la unión creada por Dios. “Jugamos” con tentaciones sin tomar en cuenta devastación potencial. Con frecuencia el resultado es una guerra civil con años de derramamiento de sangre espiritual y un rasgado eventual de lo que Dios se unió. Tenemos que parar esta deterioración en forma de espiral aún antes que comience.
A los MUCHOS padres solteros: Oro que Dios les de animo y fortaleza – Oro que El será el ayudador que tan desesperadamente necesitan. A aquellos ya casados o planeando casarse: Oro que para ahora y para siempre veamos a nuestro esposo o esposa como el verdadero regalo de Dios que nos dió para hacernos completos. Oro para que siempre demos gracias a El por habernos unido y para que nos comprometamos a proteger la unión. Oro para que siempre recordemos que Dios provee nuestra ayuda mas adecuada cuando los dos lleguen a ser una sola carne.
Tenga un Dia Centrado en Cristo!
Steve Troxel
Ministerios La Palabra Diaria de Dios