Después que la gente de Israel vagó en el desierto por 40 años, Dios los condujo a través del río Jordán hacia la tierra prometida de Canaán. Esta pasada por el río no fue ordinaria. Dios detuvo el cause del río y permitió que los sacerdotes se detuvieran en el medio del río con el arca del pacto mientras los Israelitas pasaban a pie. Este evento espectacular fue un milagro evidente que Dios quería que Su gente recordara y lo trasmitiera a futuras generaciones.
Josué 4:5-7
“Pasad ante el Arca de Jehová, vuestro Dios, hasta el medio del Jordán, y cada uno de vosotros tome una piedra sobre su hombro, conforme al número de las tribus de los hijos de Israel, para que esto quede como una señal entre vosotros. Y cuando vuestros hijos pregunten a sus padres mañana: “¿Qué significan estas piedras?”, les responderéis: “Las aguas del Jordán fueron divididas delante del Arca del pacto de Jehová; cuando ella pasó el Jordán, las aguas del Jordán se dividieron, y estas piedras servirán de monumento conmemorativo a los hijos de Israel para siempre.”
Un monumento es cualquier cosa que nos ayuda a recordar un tiempo específico cuando Dios se revela y dice: “Estoy aquí!” Nunca debemos olvidar los milagros en nuestra vida, ni los tiempos en que Dios nos da clara dirección o nos rescata de la oscuridad.
Cuando David fue a luchar con Goliat, lo hizo sin temor porque sabía: “El Señor, que me libró de las garras del león y del oso, también me librará del poder de ese filisteo” (1 Samuel 17:37). David había visto el poder de Dios y había sentido Su presencia en otras batallas. Es fácil imaginar a David con un diente de león o la garra de un león alrededor de su cuello como un recordatorio de que Dios estaba cerca.
La presencia de Dios es un maravilloso lugar – es donde nuestro Padre Celestial desea que pasemos cada día de nuestra vida! Pero Su presencia a menudo puede ser frágil; cuando la encontramos, parece que pronto se va. La mayoría de nosotros tenemos tanta influencia del mundo que fácilmente nos distraemos de Dios. No debemos permitir que esto suceda!!
Debemos estar cada vez mas conscientes de Dios mientras El trabaja en nuestra vida y en el mundo a nuestro alrededor. Mientras lo vemos y escuchamos, debemos encontrar maneras de crear memorias para nosotros mismos y aquellos que amamos; “Prefiero recordar las hazañas del Señor, traer a la memoria sus milagros de antaño” (Salmo 77:11). Los monumentos nos ayudan y nos animan a recordar.
Nunca olvidemos que El está de nuestro lado y desea que nos acerquemos, y nos mantengamos cerca. Seamos un ejemplo vivo de devoción (a cada momento) para Dios. Recuperemos un corazón de adoración y compartamos las historias del amor de Dios. Recordemos…y busquemos formas para crear monumentos perdurables.
Tenga un Dia Centrado en Cristo!
Steve Troxel
Ministerios La Palabra Diaria de Dios
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