Comunicación es una parte clave de toda relación. Sin comunicación apropiada, una relación lentamente se desvía y se aísla. Esta es una verdad entre amigos, matrimonios, y ciertamente es verdad en nuestra relación con Dios.
Sin comunicación apropiada, comenzamos a desviarnos y pronto seremos incapaces de reconocer Su voz. Cuando somos enfrentados con cargas repentinas nos sentiremos solos. Podríamos torpemente clamar a Dios para encontrar que nuestra linea de comunicación está en mal estado, llena de distracciones. Es difícil recibir dirección y ser consolados cuando ni siquiera podemos entender lo que Dios esta diciendo.
Para mantener clara la linea de comunicación, debemos desarrollar el hábito de hablar continuamente con Dios; “Orad sin cesar” (1 Tesalonicenses 5:17). No podemos limitar la oración a esos tiempos de gran necesidad. David tenía el hábito de orar por la mañana; “Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré” (Salmo 5:3). Pero también debemos aprender a hablar con Dios a través de nuestro día para estar preparados para esos momentos de extra necesidad.
Jesús nunca sufrió de una perdida de comunicación con Su padre; “Yo y el Padre uno somos” (Juan 10:30). Y aún así, cuando nos enfrentamos a decisiones y cargas mayores, Jesús aún guarda un tiempo especial para hablar con Dios.
Lucas 6:12-13
“En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios. Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles”
Siempre habrá tiempos en nuestro caminar Cristiano en que necesitaremos dedicar un tiempo con Dios – tiempos que involucran “momentos crítico” o “crisis”. Estos tiempos seran tremendamente mejorado si ya hemos estado en comunicación diaria con el Padre. Nuestras oraciones de “crisis” deberán ser más intensas y van a requerir que conozcamos íntimamente a Quien oramos – van a requerir que conozcamos Su vos y entendamos Su último plan para nuestra vida.
Nuestro Padre Celestial desea iluminar nuestro camino dando guía diaria. Desarrollemos el hábito de orar continuamente para seguir Su guía y demos cada paso en adoración. CONOZCAMOSLE durante la mundana y trivial parte de nuestro día y estaremos preparados para conocerle cuando hay urgencia. Prioricemos nuestra vida para asegurar que tenemos una libre y clara linea de comunicación.
Tenga un Dia Centrado en Cristo!
Steve Troxel
Ministerios La Palabra Diaria de Dios
