En el mensaje “El Riesgo de la Fe” vimos que el llamado de Dios siempre esta acompañado por un riesgo percibido. El riesgo podría estar en términos de las finanzas, rechazo, o el fracaso; pero siempre habrá un elemento desconocido en el llamado de Dios que requiere que confiemos y que incrementemos nuestra fe. Debemos notar que cuando seguimos el llamado de Dios, el riesgo verdadero solamente existe en nuestra mente.
Oh, por favor no mal interprete. Seguir a Dios quizá requiera sacrificio y una perseverancia dolorosa – podrán haber pruebas y circunstancias difíciles a lo largo de Su camino – pero a pesar de nuestras circunstancia físicas, enmedio de Su plan es el lugar mas seguro para caminar. Pero caminar en Su plan perfecto continuamente nos llamará a tomar un paso de fe activamente.
Cuando llegaron los que cobran el impuesto de “dos dracmas”, Jesús le dio a Pedro unas instrucciones muy interesantes de como obtener los fondos necesarios.
Mateo 17:27
“Vete al lago y echa el anzuelo. Saca el primer pez que pique; ábrele la boca y encontrarás una moneda. Tómala y dásela a ellos por mi impuesto y por el tuyo.”
Con todo el poder de Creación a Su disposición, Jesús hubiera podido producir cualquier cantidad de monedas para poder pagar el impuesto. Pero, con el cobrador esperando en la puerta, a Pedro se le fue dicho que se disculpara y que tomara su caña de pescar al lago. ¿Porque pasar por tanta molestia con el pez?
Nuestro caminar con Cristo consiste en desarrollar y crecer constantemente nuestra fe. Hubiera requerido muy poca fe para que Pedro recogiera una moneda de la mesa para pagar el impuesto. Entonces le fue dado una “oportunidad” de fortalecer su fe cuando confió en Jesús y no en su propio entendimiento (Proverbios 3:5-6). La fe de Pedro creció, y también su cercanía con Jesús, en la manera que obedeció y lanzó su caña para pescar.
Jesús es capaz de suplir todas nuestras necesidades (Filipenses 4:19). Pero El nos ama lo suficiente para guiarnos a tomar acciones específicas; “la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta” (Santiago 2:17). El objetivo realmente nunca consiste en acciones especificas o logros; sino, el crecimiento en nuestra relación con Jesús es lo más importante. ¡Nuestra fe se hace viva y crece cada vez que obedecemos, seguimos y tomamos pasos!
¿Que esta pidiendo Jesús de nosotros ahora? Muchos estan enfrentando decisiones difíceles. No entendemos por que Dios esta llamando, y no vemos como se construye Su plan. Su llamado probablemente no es nada tan ilógico como una moneda en un pez; pero el mensaje es lo mismo y nos dice: “Confía en Mi y amar a Mi con todo tu corazón!” Cuando nuestro Salvador nos llama, tenemos que estar preparados para seguir. Cuando El llama, siempre nos dará la oportunidad para tomar acción.
Tenga un Dia Centrado en Cristo!
Steve Troxel
Ministerios La Palabra Diaria de Dios
